En los últimos años han surgido distintas modalidades de entrenamiento físico y para adelgazar, que no requieren del uso de maquinarias ni pesas, y que han tenido muchísimo éxito a nivel mundial porque, a pesar de requerir de una mayor disciplina, el necesitar únicamente del propio peso hace posible ejercitarse en cualquier lugar y a cualquier hora.
Uno de estos métodos es el Animal Flow Workout, uno que se encuentra actualmente en el tope de la lista de todos los nuevos grandes entrenamientos, y que fue creado por el reconocido profesional del fitness, Mike Fitch, quien en sus más de 13 años de experiencia como entrenador personal, además de fundar el Global Training de peso corporal y de publicar el libro Building the Gymnastic Body, ha diseñado múltiples programas de entrenamiento, entre los que se encuentra el sistema del peso del cuerpo progresista GBT.
Sin desperdicio
Sin importar cuál sea el deporte que practicas, tus aptitudes o los objetivos que persigues, en el animal flow, además de diversión, vas a encontrar herramientas que sin duda te ayudarán a mejorar tu rendimiento, tu estabilidad, la comunicación neuromuscular, tu movilidad articular y tu sistema cardiovascular.
También podrás aumentar tu movilidad, tu fuerza, tu flexibilidad, tu agilidad, tu resistencia y potencia, y alcanzarás tus metas en poco tiempo, tanto si eres un atleta extremo, un yogui, un traceur, un luchador profesional, o simplemente alguien a quien le gusta mantenerse saludable o lucir un cuerpo escultural.
Imitación como base
Este programa de acondicionamiento físico, se basa principalmente en una serie de ejercicios que prometen mejorar notablemente la condición corporal.
Esto se logra a través de la imitación de movimientos de animales muy simples, que se realizan combinando actividades sobre el suelo con base cuadrúpeda (manos y pies en contacto con el piso), con elementos de diversas disciplinas de peso corporal, para crear un divertido y desafiante entrenamiento multiplanar (múltiples planos de movimiento).
Fácil y simple
Esta disciplina puede ser integrada a cualquier rutina fitness en los calentamientos dinámicos, el entrenamiento de intervalo o en circuito. Se divide en dos etapas, y consiste en tomar algún animal como ejemplo, e imitar y repetir sus movimientos para perfeccionar el propio cuerpo, algo que se practica, aunque cueste creerlo, desde el 186 a.C.
En la primera fase se adoptan poses específicas, y se realizan series con repeticiones de movimientos básicos inspirados en criaturas silvestres, como el mono, la bestia y el cangrejo. Aunque son posturas fáciles de aprender, la perfección se logra con la práctica, así que no te desanimes si fallas en tus primeros intentos.
La segunda etapa consta de una serie de ejercicios divididos en cuatro secciones: calentamiento dinámico, intercambios, viajes y combinaciones.
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