Adelgaza con ballet para adultas

Muchas de nosotras recordamos con cariño cuando, de niñas, nuestras madres nos llevaban a las clases de ballet, pero esta experiencia no tiene por qué permanecer en el ayer.

En la actualidad, existen lugares donde las adultas podemos practicar ballet, pero, ¿Cuáles son sus beneficios para el organismo? ¿Podemos adelgazar con este ejercicio?

El ballet: Ejercicio muy completo

Las clases de ballet para adultas consisten en ejercitar todo el cuerpo mediante la ejecución de ejercicios de ballet clásico. El ballet es un ejercicio muy completo, en el cual se trabaja de manera integral desde la postura corporal, hasta la tonificación muscular. 

En las sesiones para personas de edad media en adelante, se siguen los mismos parámetros que en las clases a nivel profesional, ya que se realizan los mismos ejercicios que hacen las bailarinas en una clase de ballet cotidiana: trabajo en la barra y centro, ejercicios cardiovasculares y coordinación de movimientos.
 

Práctica en boga
 

Este tipo de ejercicio ha existido desde siempre, pero desde hace un par de años ha tomado más fuerza como una manera alternativa de ejercitarse y mantenerse en forma. Entre los beneficios físicos, están:
 

■ Tonificación de brazos, piernas y abdomen.
■ Mejoría significativa de la postura corporal, con lo que se logra que la persona esté más erguida.
■ Trabajo de la flexibilidad.
■ Quema de calorías con los ejercicios de cardio (saltos o desplazamientos por el salón).
■ Mantenimiento del equilibrio corporal, ya que se trabaja el eje central del cuerpo.

Beneficios emocionales
 

■ Liberación del estrés acumulado.
■ Deconexión momentánea de la rutina y las preocupaciones.
■ Vínculo con una actividad artística, que permite la expresión libre a través del movimiento.
 

¿Es para todas?
 

Es importante destacar que realmente la edad no es un factor limitante; sin embargo, se recomienda que esta actividad sea practicada por personas con edades comprendidas entre los 18 y los 50 años. 

Por otra parte, lo que realmente importa son las ganas de aprender y la disposición necesaria para ejercitarse, ya que en cada clase se pueden quemar entre 500 y 800 calorías aproximadamente.
 

Vestimenta apropiada
 

La ropa debe ser cómoda, como la que se usa regularmente para asistir al gimnasio. Algunas personas disfrutan la práctica con su outfit de ballet, y eso funciona a la perfección; sin embargo, otras prefieren asistir a las clases con atuendos de su preferencia. 

Lo importante es que no sean prendas demasiado ajustadas, para evitar que se limite el movimiento. Las piezas como: leotards, o unitards, medias, falda, tops o leggins, son válidas. De no tener zapatos especiales para ballet, se recomienda utilizar medias o calcetines, con la finalidad de que el pie pueda moverse, flexionarse y estirarse con comodidad.

100% efectivo

Para garantizar los resultados de esta práctica, se recomienda realizar simultáneamente una dieta, la cual consista, básicamente, en comer saludablemente. Esto implica disminuir la ingesta de dulces y azúcares, así como también incrementar el consumo de proteínas y vegetales. 

La alimentación sana y balanceada contribuye a mantener un peso y una figura ideales y, sumándole a esto los beneficios del ballet, se obtienen muy buenos resultados, dependiendo de la constancia que se tenga en la actividad. Si se mantiene una buena disciplina y se asiste a todas las sesiones, el progreso puede verse en cuatro meses aproximadamente. De lo contrario, los resultados tardarán entre seis meses a un año.

Contraindicaciones
 

A pesar de que el ballet es una disciplina delicada, en las clases se trabajan ejercicios con mucha intensidad, y se hacen rutinas que incluyen trabajo cardiovascular; por ello, esta práctica tiene algunas limitaciones. Las personas con problemas en la columna, por ejemplo, o con lesiones mal curadas en áreas como las rodillas, tobillos y pies, no deben practicar esta actividad.