¿Por qué hay que adaptar el ejercicio a cada edad?

Igual que tu cuerpo va cambiando con los años, también debe ir cambiando el tipo de ejercicio que practicas para poder obtener el mayor beneficio. 

Y es que no tiene nada que ver la fuerza, resistencia y capacidad de recuperación que tienes tras un esfuerzo a los 30 años que a los 50.

El ejercicio a cada edad

A los 20 años. Tus músculos están fuertes y cada día ganas masa ósea, con lo que tus huesos y articulaciones se hallan en plena forma. Por eso cualquier tipo de ejercicio es apto para esta edad, aunque el baile, el ejercicio aeróbico o con máquinas de entrenamiento cardiovascular estimulan la formación de endorfinas que mejoran la sensación de bienestar.
 

A los 30 años. Comienzas a perder masa ósea, por lo que te interesa unir al ejercicio aeróbico, ejercicio de fuerza o resistencia, como tablas con gomas, pelotas de goma espuma, etc. Las clases colectivas de tonificación o entreno de glúteos, abdominales y piernas resultan ideales.

A los 40 años. El yoga, el taichi o el pilates son estupendos en esta etapa. También es aconsejable que realices al menos tres veces por semana ejercicios de resistencia para mantener una buena masa ósea y muscular y permitir que se metabolice mejor la grasa y el glucógeno. A algunas personas el tenis, el ciclismo o correr les funcionan para liberar tensiones, mientras que a otras les van mejor los ejercicios de estiramiento y relajación, y así además evitan contracturas.
 

A los 50 años. Resulta idóneo el "entrenamiento funcional", que incluye ejercicios de movilidad, agilidad, flexibilidad y fuerza orientados a realizar posteriormente cualquier actividad diaria de forma sencilla y autónoma. Por otro lado, más que nunca debes mantener una rutina diaria basada en 30 minutos de ejercicio cardiovascular.
 

A partir de los 60 años. Si previamente no hacías ejercicio, la actividad física más sencilla que puedes y debes practicar es dar una buena caminata, a paso ligero y durante 45 o 50 minutos diarios. Pero si antes ya te entrenabas, puedes seguir con tu rutina.

Los básicos que siempre funcionan
 

Hay ciertos tipos de ejercicio adecuados a cualquier edad que solo debes ir adaptando en frecuencia e intensidad.

Aeróbicos en cualquier momento Son aquellos basados en la respiración, que por su intensidad requieren principalmente de oxígeno para su mantenimiento. Los más comunes son caminar, bailar, nadar y pedalear.
 

Ejercicios de resistencia para los huesos Se trata de los ejercicios que trabajan músculos, articulaciones y tejidos circundantes a alta intensidad pero durante poco tiempo. Los más típicos serían los que emplean pesas. Contribuyen a quemar grasa y aumentar la masa muscular.
 

Entrenamiento funcioanl en casa Destinado a ejercitar el cuerpo en todos sus ejes y movimientos de forma integral, no solo una zona localizada. Se trabaja en las clases de fitness de gimnasios, pero se puede adaptar al ámbito doméstico.