Muchas personas creen que si se someten a un procedimiento para retirar grasa de su cuerpo como la liposucción, ya han resuelto su problema de sobrepeso. Sin embargo, no siempre es así.
En estos casos, se recomienda lo siguiente:
Cuidar lo que se come y evitar el consumo de alimentos con alto contenido calórico, como las frituras.
Reducir el consumo de aceites de cualquier tipo
Evitar los dulces, bebidas alcohólicas y golosinas, y no picar entre comidas. Si este último hábito sucede con frecuencia, está teniendo un déficit en su alimentación.
Estas pueden ser algunas de las recomendaciones generales para que una persona pueda mantener un peso saludable después de una liposucción.
Sin embargo, cambiar los hábitos no es cosa fácil, es una decisión que requiere de muchas ganas y de entender cómo funciona su cuerpo, para identificar los mensajes que éste envía el cerebro, tener disciplina y organización y, sobre todo, seguir indicaciones.
De esta manera, los resultados aunados al tratamiento estético podrán tener un efecto realmente positivo y prolongado, y ¿por qué no? permanente.
No olvide que la actividad física, como hacer ejercicios o practicar algún deporte, ayudará a evitar que reincida en los problemas de peso, a la vez que le permitirá tonificar su cuerpo.
Es un trabajo en equipo y para ello debe trazarse metas realistas que pueda sostener a largo plazo.
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