La dieta alcalina es el últlimo "boom" entre grandes famosos como Victoria Beckham, Jennifer Aniston, Gwyneth Paltrow, Robbie Williams y Kirsten Dunst que desean mantenerse delgados y atractivos.
Sin embargo, resulta conveniente preguntarse ¿En qué consiste esta dieta? ¿Resulta conveniente para nuestra salud?
La dieta alcalina y la salud
La dieta alcalina tiene como objetivo, no sólo perder peso, sino eliminar todo aquello que perjudica a nuestro organismo. Es decir, lo principal es conseguir un nivel de 7,4 de pH, que ayuda al organismo a mantener sus reservas de calcio y magnesio para beneficiar a los músculos, los huesos y el corazón, y prevenir enfermedades como la osteoporosis.
Según Natasha Corrett, autora del libro Honestamente Saludable, lo ideal para mantener una dieta alcalina es consumir un 70% de alimentos alcalinos y un 30% de alimentos ácidos y según estudios realizados, esta dieta resulta positiva para prevenir enfermedades, ya que las células cancerígenas no pueden vivir en medios alcalinos.
¿Cuáles son los alimentos alcalinos y cuáles no?
Según esta dieta, los alimentos adecuados son: Las lentejas, las cerezas, el brócoli, el perejil, el apio, las manzanas y las uvas.
Igualmente, son aceptados el té verde, té de hierbas, leche de soja, zumos de fruta, todas
las verduras, aceite de oliva, las aceitunas y el aceite de linaza.
Aquellos alimentos que deben ser eliminados o limitados en cuanto a su consumo son carnes, pescados, harinas, bollería industrial, huevos, leche de vaca, azúcar, alcohol, bebidas con cafeína, carbohidratos refinados o quesos duros.
Acción preventiva
Consumir menos ácidos evita que nuestro organismo deba recurrir a utilizar minerales como el calcio o el magnesio de nuestros propios huesos.
Así se previenen la mayor parte de dolencias crónicas como la artritis o el reúma, que provienen de un exceso de acidez en el organismo. Los dolores de cabeza, la osteoporosis, los quistes ováricos y otras dolencias óseas con esta dieta pueden evitarse.
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